Si estás considerando adquirir un vehículo, es fundamental realizar una exhaustiva revisión de coches de segunda mano antes de tomar una decisión. Esta inspección te permitirá conocer el estado real del vehículo y asegurarte de que no estás adquiriendo un coche con problemas ocultos. En este artículo, te presentamos una guía completa paso a paso para llevar a cabo una revisión detallada de un coche de segunda mano. Por cierto, recientemente hemos publicado un artículo que puede servirte de ayuda si tienes dudas sobre qué pasa si rayas un coche de alquiler.
Revisar el exterior del coche
El primer paso en la revisión de un coche de segunda mano es examinar detenidamente el exterior del vehículo. Aquí te presentamos los aspectos clave a tener en cuenta durante esta inspección:
Estado de la carrocería
Comienza por examinar cada parte de la carrocería, incluido el techo. Presta atención a cualquier mancha de óxido, abolladuras o arañazos. Observa los espacios entre los paneles para detectar posibles diferencias, ya que esto podría indicar que el coche fue mal ensamblado o mal reparado. Asegúrate también de que el color y el acabado de la pintura sean consistentes en todas las partes del vehículo. Por último, prueba todas las puertas, el capó y el maletero para asegurarte de que se abren y cierran correctamente. Inspecciona las juntas de goma alrededor de las puertas y ventanas para verificar su estado.
Cristales y lunas
Observa el cristal del coche para asegurarte de que no haya marcas o rayaduras significativas. Pequeñas rayas pueden ser aceptables, pero podrías utilizarlas como argumento para negociar el precio. En el caso de que haya grietas en el cristal, debes tener en cuenta que estas podrían empeorar con el tiempo y requerir reparación.
Suspensión
La revisión de la suspensión es otro aspecto fundamental. Colócate a un lado del coche y comprueba si la suspensión es demasiado blanda. Para ello, empuja hacia abajo en una esquina del coche. Si los amortiguadores están en buen estado, el coche debería rebotar una sola vez. Si continúa moviéndose hacia arriba y hacia abajo, es posible que haya algún problema con la suspensión. También puedes tirar de la parte delantera de la carrocería para verificar si escuchas o sientes algún ruido extraño, lo cual podría indicar problemas en los rodamientos o en otros componentes de la suspensión.
Chasis
Es esencial verificar si el chasis del coche presenta algún daño. Abre el capó y revisa los soportes del parachoques. Estos deberían estar atornillados en su lugar y no soldados. Además, observa si hay marcas de arañazos en las cabezas de los tornillos del interior del capó, en la parte superior de los guardabarros. Si encuentras marcas, esto podría indicar que se han realizado reparaciones o ajustes después de un accidente. Por último, verifica las soldaduras en el interior de los marcos de las puertas.
Luces y faros
Asegúrate de que todas las luces y faros del coche estén en buen estado y funcionando correctamente. Verifica las luces cortas y largas, los intermitentes, los faros antiniebla, las luces de freno, la tercera luz de freno y la luz de marcha atrás. Además, comprueba que las lentes y los reflectores no estén dañados, empañados o en mal estado.
Neumáticos
Los neumáticos pueden proporcionarte información valiosa sobre el historial del coche. Observa detenidamente el desgaste de los neumáticos. Muchas veces, un coche con menos de 30,000 km aún tendrá los neumáticos originales. Si el coche tiene neumáticos nuevos con muy pocos kilómetros, esto podría ser un indicio de que se ha manipulado el cuentakilómetros. Además, asegúrate de que los cuatro neumáticos sean iguales, ya que diferentes neumáticos podrían indicar que se han reemplazado. El desgaste de la banda de rodadura debe ser uniforme en toda la anchura del neumático. Si observas un desgaste excesivo en los laterales de las ruedas delanteras, esto podría indicar que el dueño anterior era un conductor agresivo. Verifica también la profundidad mínima legal de la banda de rodadura, que suele ser de 1.6 mm. Por último, asegúrate de revisar el estado de la rueda de repuesto y de que tengas todas las herramientas necesarias para cambiar los neumáticos.
Sistema de escape
En la revisión exhaustiva del coche, es importante comprobar el estado del sistema de escape. Busca manchas negras que puedan indicar fugas de aceite. Pasa el dedo a lo largo del sistema de escape y verifica si la suciedad es grasosa, lo cual podría ser una mala señal. Si el motor está en marcha y notas vapor blanco en un día cálido, esto también podría ser un indicio de problemas.
Revisar el interior del capó
En esta etapa, nos enfocaremos en el motor y los componentes internos del vehículo. Presta atención a los siguientes puntos:
Motor
Revisa el motor en busca de signos de corrosión o fugas. Una fuga en la junta de culata dejará manchas de aceite oscuro en el bloque del motor. Verifica que los depósitos de líquido no presenten fugas y comprueba el nivel de aceite utilizando la varilla correspondiente. Si encuentras espuma en el interior del tapón del depósito de aceite, esto podría indicar una fuga en la junta de culata. El líquido refrigerante no debe estar sucio ni tener un color marrón, ya que esto podría indicar fugas o falta de mantenimiento. Por último, verifica el nivel de líquido de transmisión utilizando la varilla correspondiente. El líquido debe tener un color rosa o rojo, sin olores desagradables.
Correa de distribución
La correa de distribución es un componente clave en el motor y suele ser costoso de reemplazar. Verifica el estado de la correa de distribución, ya que su duración normal suele ser de entre 100,000 y 160,000 kilómetros. Asegúrate de que la correa esté en buen estado antes de continuar con la revisión.
Líquidos
Verifica el nivel de otros líquidos importantes, como el líquido de frenos, el líquido de dirección asistida y el líquido de embrague (en caso de que el coche sea manual). Asegúrate de que los niveles sean adecuados y de que no haya signos de fugas.
Revisar el interior del coche
El siguiente paso es examinar el interior del coche para evaluar su estado general y comprobar el funcionamiento de los diferentes sistemas. Aquí encontrarás los aspectos clave a tener en cuenta:
Tapicería y asientos
Examina la tapicería y los asientos en busca de manchas, rasgaduras, quemaduras de cigarrillos u otros daños. Presta especial atención al asiento del conductor, ya que suele ser el más utilizado y podría presentar un mayor desgaste. Además, verifica que los asientos se ajusten correctamente y que todos los mecanismos de ajuste funcionen correctamente.
Aire acondicionado y calefacción
Si el coche está equipado con aire acondicionado, verifica que funcione correctamente. Asegúrate de que el aire acondicionado enfríe y el sistema de calefacción caliente adecuadamente. Si el coche tiene un sistema de climatización automático, prueba todas las funciones y ajustes para asegurarte de que funcionan correctamente.
Sistema eléctrico y electrónico
Comprueba el funcionamiento de todos los sistemas eléctricos y electrónicos del coche. Asegúrate de que todas las luces interiores funcionen correctamente y de que no haya problemas con los mandos del volante, los elevalunas eléctricos, el sistema de audio, el sistema de navegación y otros dispositivos electrónicos.
Instrumentación y testigos luminosos
Antes de arrancar el coche, verifica que la instrumentación y los testigos luminosos del panel de control funcionen correctamente. Todos los testigos deben encenderse al poner el contacto y apagarse después de unos segundos, excepto los testigos de «stop», «contacto o batería» y «freno de mano» si está activado. Consulta el manual del propietario para conocer qué testigos deben encenderse y apagarse durante la prueba.
Realizar una prueba de conducción
Una de las mejores formas de evaluar un coche de segunda mano es conducirlo. Durante la prueba de conducción, presta atención a los siguientes aspectos:
Frenos
Comprueba el funcionamiento de los frenos. No debería haber vibraciones fuertes en los pedales, ruidos extraños o chirridos al frenar. Si los frenos se bloquean parcialmente y luego se liberan, es posible que necesiten nuevas pastillas o que los discos deban ser rectificados.
Suspensión y comportamiento en carretera
Presta atención al comportamiento del coche en diferentes tipos de carreteras y velocidades. Verifica que la suspensión sea suave y que el coche no presente vibraciones o ruidos anormales. Realiza giros bruscos y maniobras evasivas para evaluar la estabilidad y la respuesta del coche.
Caja de cambios
Comprueba el funcionamiento de la caja de cambios en todas las marchas. Asegúrate de que los cambios sean suaves y que no haya dificultades para engranar las marchas.
Tomar una decisión informada
Después de realizar la revisión exhaustiva del coche, es hora de tomar una decisión informada. Antes de finalizar la compra, considera los siguientes aspectos adicionales:
Historial del vehículo
Es importante obtener un informe oficial del historial del vehículo antes de tomar una decisión final. Este informe te proporcionará información sobre el número de propietarios anteriores, posibles accidentes, reparaciones importantes y mucho más. Puedes obtener un informe del vehículo a través de fuentes confiables como CARFAX.
Mantenimiento y documentación
Revisa la documentación del coche, incluido el libro de mantenimiento sellado por el taller o talleres autorizados. Verifica si se han realizado los mantenimientos periódicos recomendados y si hay facturas que respalden las reparaciones y el mantenimiento realizado en el coche.
Precio y negociación
Una vez que hayas evaluado todas las características del coche y su estado general, considera si el precio es justo en relación con el valor del vehículo. Si encuentras algún problema o reparación pendiente, puedes utilizar esta información para negociar un mejor precio.
Recuerda que siempre es recomendable contar con la opinión de un mecánico de confianza antes de tomar una decisión final. El mecánico podrá realizar una revisión detallada y brindarte una evaluación imparcial del coche.
En resumen, la revisión de un coche de segunda mano es un paso crucial para asegurarte de que estás tomando una decisión informada. Sigue esta guía paso a paso y no dudes en consultar a un experto si tienes alguna duda. Te recomendamos consultar este artículo sobre las normas de conducción en carretera.